Nada
-1-
Oídos para qué,
sólo hace
falta un sentido,
el de la dejadez.
-2-
Seguir el ritmo
propio. Vivir
en la monotonía
y pasear por el jardín.
-3-
Flotando en el agua,
sobrenadándola,
y deslizarse
con brazadas constantes.
-4-
Cansarse del hastío
y repetir.
Hacer nada sin fin.
Y luego,
nada de nuevo.